¿Qué pasa en SUMA?
Algo sucede al interior del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas de Puebla.
Y no es nada alentador en tiempos de pandemia.
Pongamos en contexto.
SUMA ofrece traslados pre hospitalarios, recepción y gestión de llamadas de emergencia, así como, asistencia sanitaria en los centros de urgencias.
En su página se muestra como una dependencia de salud muy saludable, noble y con un servicio muy loable.
Enn sus páginas encontramos la siguiente información: La institución –claro está SUMA- cuenta con 233 ambulancias en todo el estado de Puebla, dos unidades de incidentes masivos, cinco motoambulancias, 10 SUMA bikes, 5 camionetas de intervención rápida, así como un camión hospital campaña.
Hasta ahí todo bien.
Se habla que, para la zona metropolitana de Puebla, existen sólo seis ambulancias.
Una de ellas, solo para la cualquier urgencia o emergencia asignada al gobierno del estado.
Otra ambulancia Covid19.
Y cuatro más para emergencias.
A lo que se tiene que poner atención, es que su servicio de ambulancias ni es gratuito y mucho menos de atención rápida.
El tema de corrupción al interior de SUMA, se podría presumir.
Desde muy arriba, mejor dicho, personas cercanísimas al morevallista y galista Omar Felipe Rodríguez Guridi, quien aún encabeza este servicio en el estado de Puebla, lo señalan como quien se encarga de ejecutar tráfico de pacientes levantados en algún servicio, accidente o de atención médica.
Los hospitales presumiblemente involucrados en los moches por paciente son: Betania y UPAEP.
Nuestra fuente debidamente documentada, explica lamentando la situación.
Ya dado el servicio de ambulancia de SUMA, los radios comienzan a sonar de ambos lados, y tras dos o tres preguntas de rutina: qué coche trae el accidentado, de qué casa y zona salió la persona atendida o qué reloj usa, es como clasifican al paciente y en lugar de llevar al herido al hospital más cercano, la instrucción es llevarlo al Betania o UPAEP, para después, cobrar, se presume, su moche.
Mientras tanto, en Cruz Roja –pasa de todo o de nada- en estos momentos en tiempos de emergencia sanitaria no cuenta con personal médico, paramédico, de auxilio ni mucho menos voluntarios.
La benemérita institución no cuenta con personal adecuado, suficiente y menos para los insumos necesarios para mover sus unidades, que dicho sea de paso se encuentra en mal estado.
La pandemia se los comió.
La Secretaría de Salud del Estado, tendrá que poner atención a esta irregularidad presentada en los servicios de SUMA, por lo menos revisar o implementar una revisión al trabajo de la dependencia de emergencias.
Tendrá que ejecutar de ahora en adelante un estricto control de calidad y de servicio por parte de la institución de auxilio, para evitar el llamado tráfico de pacientes.
No puede echar a perder, mucho menos manchar el morenovallista y galista, Omar Felipe Rodríguez Guridi titular de SUMA, el reconocimiento por parte del gobierno federal, al trabajo de salud que ha efectuado la administración que encabeza Luis Miguel Barbosa Huerta, enfrentando la pandemia con estrategia sanitaria adecuada.
Debe cortarse de tajo el tráfico de pacientes e imagino un jugoso negocio de diezmo o moches para Rodríguez Guridi.
Lamentable.
