Lo bueno, lo malo y lo feo.
Todos, todos los líderes políticos tienen, cuentan, están marcados; vamos, traen un ADN que no podrán dejar de lado jamás.
Hace un par de días los periodistas Gerardo Ruiz “El Incorrecto” e Iván Tirzo Director de MTP Noticias, en el noticiero “En Punto Puebla” –en la mesa de debate que se da cada miércoles de 8 a 8:30 de la mañana- efectuaron una radiografía de cada uno de los líderes partidistas.
Retrataron al aire a Paco Ramos líder del Partido Encuentro Solidario; Néstor Camarillo del PRI; Rafael Moreno Valle de Fuerza por México; Ramón Fernández Solana de Redes Sociales Progresistas; Genoveva Huerta del PAN, además, Carlos Martínez Amador del PRD.
Hoy no analizaré su estirpe, su sangre política de cada uno de estos personajes.
Sino lo bueno, lo malo y lo feo de cada uno.
Comencemos.
Francisco Ramos.
Lo bueno: Político joven, echado para adelante, intenta hacer su esfuerzo para poder llevar a buen puerto al incipiente Partido Encuentro Solidario.
Lo malo: Su pasado inmediato, amigo del hijo de Mario Marín, yerno de Rosario Robles –hoy presa por la “Estafa Maestra”- cercano a Juan Carlos Lastiri -personaje inmerso en el drama de su ex jefa charito- y ahora bajo la sombra enorme del diputado federal, Fernando Manzanilla.
Lo feo: Que una vez su instituto político ya despareció, y no se ve quién impida una segunda extinción.
Néstor Camarillo
Lo bueno: Tener las riendas del liderazgo de un alicaído Partido Revolucionario Institucional.
Lo malo: Su presunto pasado con personajes oscuros ligados al huachicol cuando era presidente de Quecholac.
Lo feo: Pretender algún cargo de elección popular y que en sus espaldas una vez que haga público su deseo, pueda llevar letrero de indiciado.
Genoveva Huerta
Lo bueno: Ser la única mujer en la alianza “Va por México” conformada por el PRI-PAN-PRD que bien la pueda depositar en cualquier cargo de elección popular como diputada federal o local por aquello del género.
Lo malo: Que pretenda aspirar a la candidatura a la presidencia municipal de Puebla y que ella misma sepa que no le dan los números para ganar.
Lo feo: La sangre morenovallista que no la deja vivir amplia y plenamente su liderazgo al interior del Partido Acción Nacional por su soberbia.
Ramón Fernández
Lo bueno: Nobel político con una amplia posibilidad de hacer carrera en Redes Sociales Progresistas, con experiencia arrebatada a sus maestros que ha tenido cerca como ejemplo.
Lo malo: Su pasado inmediato lo puede frenar, quitarse el estigma del ex gobernador, Mario Marín Torres, no le será fácil al menos que en una de esas pueda salir a romper cuanto antes con él.
Lo feo: Conforme transcurra su liderazgo estatal al frente de RSP el choque que tendrá con sus amigos, principalmente Cristián Macip, será inminente.
Carlos Martínez Amador
Lo bueno: Que bien podría dejarle una nueva posición como diputado local o federal, el ser líder de lo queda del partido del sol azteca.
Lo malo: Es que una vez que logre su objetivo, se vuelva al partido de sus amores que tiene tatuado debajo de esa chamarra y ese chaleco amarillo, regrese al PRI.
Lo feo: Es que para llegar a la posición que él piensa, tendrá que pasar por encima de Roxana Luna y su hermano, Bladimir, que son los que realmente manejan el PRD poblano.
Rafael Moreno Valle
Lo bueno: Político ampliamente experimentado y ganado su espacio por méritos propios, además, de estar altamente posesionado en la sociedad poblana.
Lo malo: Que, para seguir creciendo en lo político, tendrá que dejar de pensar en alguna posición como legislador federal o local, para dedicarse de lleno al posicionamiento de la marca Fuerza por México.
Lo Feo: Que bien podría ser su primer encargo partidista de importancia y sucumbir, además, de desaparecer a su instituto político en la primera de cambio.
