El Puebla de la Franja clasificó directo a la liguilla, algo que no lograba desde el Clausura 2021 (el primero de Larcamón) cuando fue tercero de la tabla y llegó hasta las semifinales; con su pase directo aseguró su sexta participación en las últimas siete liguillas (el único que falló fue Eduardo Arce quien se quedó en la repesca del Clausura 2023 al perder 1-0 con Tigres), aunque estamos hablando que entre repechajes y fiestas grandes son siete participaciones consecutivas en la llamada fase final, lo que constituye uno de los períodos de más estabilidad del club sólo por debajo de la época gloriosa cuando se ligaron nueve seguidas desde la 84-85 hasta la 91-92 aunque en ese lapso se consiguió un campeonato de liga, un subcampeonato y dos Copas México.
La clasificación poblana a la liguilla de este Apertura 2023 se veía muy improbable el 22 de agosto cuando se perdió 1-0 con el hermano Mazatlán lo que provocó la salida de Eduardo Arce como timonel con una cosecha de un punto de quince disputados con cuatro goles a favor y diez en contra, sin olvidar la triste participación en la Leagues Cup con una goleada en contra ante Minnesota y un empate frente a Chicago Fire con victoria en penales.
Eran momentos en que se criticaba duramente a la directiva por dejar salir a jugadores claves como Antony Silva y Emanuel Gularte, en que Iván Rodríguez era centro de gran parte de otras críticas por sus errores en la portería, los refuerzos extranjeros llegaron tarde y parecían no estar a la altura de las urgencias camoteras, una situación que evidenció el propio Eduardo Arce al calificar como “proyecto” al central paraguayo Sebastián Olmedo quien jugó poco con el joven timonel. Tras perder contra Mazatlán la directiva decidió cortar el “proyecto” de Arce Peña, como no había tiempo nombró como interino a Ricardo Carbajal, quien era el técnico de la sub 23, el viernes 25 de agosto el equipo de la Franja venció 1-0 a Juárez que llegaba como uno de los líderes del torneo. Carbajal colocó en la cancha a Iván Rodríguez, Gustavo Ferrareis, Sebastián Olmedo, Gastón Silva y Brayan Angulo, en la defensa; Pablo González, Diego de Buen, Kevin Velasco y Daniel Álvarez, en la media cancha; Guillermo Martínez y Martín Barragán, en la delantera (cabe destacar que sólo la baja de Ferrareis por acumulación de tarjetas amarillas evitó que ayer ante Cruz Azul fuera la misma alineación), es decir de inmediato le dio lógica al parado y acabó con los inventos del anterior estratega.
Pero la directiva siguió su búsqueda para la dirección técnica y encontró una posibilidad en Gerardo Espinosa quien se encontraba al frente de la selección sub 23 pero sin contrato; sin embargo, el reglamento prohíbe que un miembro de una selección nacional pueda enrolarse con un club de forma inmediata por lo que se anuló la contratación lo que significó otro golpe mediático y la prueba irrefutable que había fallado la planeación para este torneo. Carbajal recibió un segundo partido que fue el del 1 de septiembre, otra vez en casa frente a los Xolos de Tijuana, en la cancha el equipo de la Franja (que repitió alineación) fue superior a la escuadra fronteriza y supo reflejarlo en el marcador con los tantos de Kevin Velasco al siete, Guillermo Martínez al treinta y seis y el autogol de Lucas Cavallini al 52, sin olvidar que con el juego 1-0 Iván Rodríguez realizó una atajada clave para mantener la ventaja poblana.
Fue el duelo de la supuesta alineación indebida de Luis Miguel Noriega quien no apareció en la cédula y estuvo en la banca, la Comisión Disciplinaria actuó de oficio y determinó quitarle los tres puntos al Puebla y otorgárselos al Tijuana pese a que la directiva poblana desde un principio demostró que el sistema de la liga no permitía ingresar a Noriega y que desde el juego contra Juárez el árbitro Diego Montaño había accedido a hacerlo de forma manual y en ese caso no había existido problema. La Federación se mantuvo en su postura, regañó al Puebla públicamente y obligó a la Franja a acudir a la Comisión de Apelaciones, paso previo para llegar al Tribunal de Arbitraje Deportivo. La afición seguía molesta, era otra muestra de la falta de cuidado de la directiva y no creyó la promesa de ir al Tribunal; en medio de esto se anunció que Carbajal se quedaría al frente del equipo lo que restaba del torneo.
Desde un principio el timonel dejó en claro que su equipo había ganado en la cancha los tres puntos frente a Tijuana, que confiaba en la directiva pero que se enfocaría en ganar la mayor cantidad de unidades para que no se extrañaran. Partido a partido el Puebla fue creciendo en lo futbolístico, jugadores como Ferrareis recuperaron la confianza, la dupla González- De Buen se asentó en la media cancha y ambos se convirtieron en baluartes de la idea de Carbajal. Entre los que crecieron están Sebastián Olmedo que dejó de ser un proyecto (como lo llamó Arce) para ser una realidad y recordar que el futbol es de calidad, no de estatura como en el juego contra Mazatlán señaló uno de los comentaristas de la televisora del Ajusco, Iván Rodríguez fue apareciendo con alguna atajada determinante como ante Tijuana y Juárez y en la delantera se empezó a soltar Guillermo Martínez quien en los primeros cinco juegos llevaba un gol (contra San Luis) y se convirtió en la referencia ofensiva para Ricardo Carbajal al grado de finalizar como subcampeón de goleo con diez tantos, sólo por debajo de los once de Harold Preciado con Santos Laguna.
Con Carbajal el Puebla no perdió fuera de casa: Empató con Querétaro y Pachuca y se apuntó triunfos contra Atlas, Necaxa, Toluca y Cruz Azul, mientras que en el Cuauhtémoc tras las victorias frente a Juárez y Tijuana, siguieron tres en los que no pudo ganar con derrotas frente a Pumas y Chivas (que dejó sin margen de error al equipo) y un empate frente a los Rayados de Monterrey donde el timonel dio muestra de su manejo al frenar al equipo en los instantes finales para no desbocarse y sufrir ante un equipo con tanta pegada, esa noche del martes tres de octubre el Puebla de Carbajal demostró que podía competir ante las grandes plantillas y nóminas del futbol mexicano. Tras perder ante Chivas en la jornada trece y quedar sin mucho margen el equipo de la Franja respondió ganando diez de los últimos doce en disputa, con tres triunfos en fila ante Toluca, León y Cruz Azul, dos de ellos fuera de casa. La efectividad de Carbajal fue del 66.6% ya que ganó veinticuatro de los treinta y seis puntos que disputó para meter al Puebla de forma directa a la liguilla.
Si hiciéramos una tabla general de doce juegos (desde que Ricardo Carbajal se hizo cargo de la dirección técnica del Puebla) llegaríamos a la conclusión de que la Franja fue el segundo mejor equipo en este lapso, sólo por debajo del América de Jardiné que sumó treinta unidades por las veinticuatro de la Franja; es decir la escuadra poblana superó la cosecha de equipos como Monterrey (23), Pumas (22) y Tigres (19) que ocuparían los cinco primeros lugares de esta hipotética tabla donde las escuadras que menos sumaron fueron Juárez con siete y Atlas con nueve. Estos datos se ofrecen para ilustrar el gran trabajo del cuerpo técnico que encabeza Ricardo Carbajal auxiliado por Luis Miguel Noriega, Isaac Moreno y como preparador físico Eric Roqueta.
La estabilidad de la que se hablaba en anteriores líneas también se demuestra en la tabla de cocientes donde el equipo de la Franja es noveno con 117 unidades en ochenta y cinco partidos sacando treinta y dos puntos al último lugar, Tijuana y treinta al Mazatlán, equipos que pagarían la multa junto a Juárez cuyo cociente es más volátil. El Puebla está mejor que Cruz Azul y Pumas, por poner un ejemplo y está a dos de Santos Laguna y a seis del Toluca, porque finalmente esas siete clasificaciones consecutivas a fase final se han conseguido al no bajar de veinte unidades por campeonato lo que da un mayor margen en esta tabla de cocientes que fue la gran amenaza durante cerca de treinta años y que mandó a la franquicia en dos ocasiones a la llamada en ese entonces Primera “A”.
Mientras Iván Rodríguez crecía y regalaba atajadas que significaron puntos para este Puebla de Carbajal, mientras Guillermo Martínez callaba bocas con sus goles y se erigía como el delantero mexicano con más goles, mientras González crecía para que De Buen luciera, mientras Olmedo se convertía en un central de garantías, mientras Daniel Álvarez regalaba asistencias y buenas actuaciones ante Toluca y León, la directiva cumplía su promesa de acudir al Tribunal de Arbitraje Deportivo para defender hasta la última instancia los puntos ganados en la cancha frente a Tijuana, la directiva lo hizo ante la incredulidad de un sector de los medios de comunicación y de la afición que hablaban de que no había dinero para acudir a una instancia internacional, otros hasta decían que iba ir a hacer el ridículo, pero la semana pasada el TAS concedió la audiencia para escuchar a las dos partes (Puebla y Federación Mexicana de Futbol ya que Tijuana ni siquiera había protestado el partido del 1 de septiembre) y el jueves dictaminó que los tres puntos, así como los tres goles que había anotado eran propiedad del Puebla.
La directiva cumplió su palabra y sentó un precedente porque los clubes mexicanos no acostumbran ir ante la justicia internacional y enfrentar a doña Fede, la directiva defendió los puntos hasta la última instancia y no sólo ganó sino que ayudó a que la propia Federación reconociera que estudiará sus procedimientos para estar a la altura de las prácticas internacionales lo que ayudará al futbol mexicano a ser más eficiente en lo administrativo, lo que son las cosas una Federación que inició regañando al Puebla y pidiéndole que fuera más pulcro en sus procesos terminó siendo señalada por lo mismo ya que el árbitro de aquel duelo César Ramos Palazuelos se negó a inscribir manualmente a Luis Miguel Noriega como una semana antes sí lo había hecho Diego Montaño.
En una temporada con tantos incidentes extra cancha (el número repetido con el que se registró a Jesús “Tecatito” Corona con Monterrey y la aparición de José Esquivel en la banca de Mazatlán para el duelo ante Chivas cuando había acumulado cinco tarjetas amarillas pero que la Federación no acusó al equipo sinaloense porque el sistema no había avisado que estaba suspendido), el Puebla fue el único equipo que acudió a las instancias internacionales para defender sus puntos y demostrar las incongruencias federativas. En un primer momento, Chivas amagó con acudir al TAS y no lo hizo, mientras que la directiva de la Franja sí cumplió con su palabra por lo que es hora de reconocer a esta junta que ciertamente no es perfecta, que sí cometió muchos errores en la planeación de este semestre (el más grave confiar mucho en un joven timonel y hacerle caso en todas sus peticiones incluyendo dejar ir a activos importantes), pero que supo reaccionar para defender los intereses del Puebla, estar a la altura de un grupo de jugadores que creyó en Ricardo Carbajal y luego trabajó mucho para recomponer la situación.
Ricardo Carbajal será el único timonel mexicano en la postemporada incluyendo liguilla y play in, pero así como es necesario reconocer su gran relevo, la lógica con la que ha dotado al plantel y la forma en la que ha convencido a los jugadores, es necesario reconocer a Iván Rodríguez quien supo convivir con la presión para hacer grandes atajadas tan importantes como las tres de ayer, una doble a quemarropa ante Juan Escobar que preservó la ventaja y otra a un disparo de Carlos Rodríguez que iba al ángulo, es necesario reconocer a Sebastián Olmedo (a quien trajo esta misma directiva acusada de equivocarse mucho), quien de inmediato se hizo de un puesto titular a partir de la confianza del nuevo cuerpo técnico. También es tiempo de reconocer a una directiva que le ha dado estabilidad a un club no acostumbrado en tenerla y que supo defender los intereses camoteros acudiendo a instancias internacionales para sentar un precedente en un futbol mexicano demasiado miedoso de doña Fede. El Puebla clasificó a la liguilla por su trabajo de equipo dentro y fuera de la cancha.
