Los negocios de disfraces como “La Oveja Negra”, ubicada en el centro histórico de Puebla son abarrotados por poblanos que buscan mantener las tradiciones y costumbres, a pesar de la contingencia sanitaria del COVID-19.
Aunque por la pandemia las fiestas de disfraces o Halloween están prohibidas por las autoridades sanitarias, establecimientos esperan un repunte en sus ventas para la celebración de Día de Muertos.
En entrevista, algunos de los jóvenes quienes acudieron a comprar un disfraz admitieron que en redes sociales, especialmente en Facebook, están invitando a fiestas; sin embargo, señalaron que no es momento para ello.
“Vine a comprar un disfraz para regalar pues no acostumbro ir a algún Hallowen, aunque sí hemos recibido invitaciones, pero por la pandemia no vamos a ir, porque ya termino la cuarentena pero no el virus”, dijo uno de ellos.
Asimismo, padres de familia acompañados de sus hijos acuden a este tipo de establecimientos para comprar un disfraz y así poder mantener una de las tradiciones más arraigadas en todo el país.
“Vengo a comprar un disfraz para los niños, simplemente para no perder la tradición, realmente ahorita con la situación de la pandemia está complicado, preferimos no arriesgarnos pero es importante que a los niños no se les olvide”, expresó.
Cabe destacar que pese a la contingencia sanitaria del COVID-19, poblanos no han dejado de acudir a estos negocios para adquirir y utilizar un disfraz durante la celebración de Todos Santos.