¿Sabía usted que el 75% de los mexicanos padecen estrés laboral? Esta preocupante cifra coloca a México por encima de otros países como China y Estados Unidos.
De acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el estrés laboral puede provocar la saturación física y mental del trabajador, generando consecuencias como afectaciones a la salud y a su entorno más próximo, por el desequilibrio entre lo laboral y lo personal.
Los síntomas pueden ser emocionales, conductuales, cognitivos y fisiológicos, por lo que es importante saber reconocerlos y detectarlos a tiempo a fin de recibir un tratamiento.
Los síntomas emocionales son ansiedad, miedo, irritabilidad, mal humor, frustración, agotamiento, impotencia, inseguridad, desmotivación e intolerancia.
Los conductuales, disminución de la productividad, dificultades en el habla, cometer errores, risa nerviosa, reportarse enfermo, llanto, trato brusco en las relaciones sociales, apretar las mandíbulas y aumento de consumo de tabaco, alcohol y otras sustancias.
También puede presentarse síntomas cognitivos como dificultad de concentración, olvidos, confusión, reducción de la capacidad de solución de problemas, reducción de la capacidad de aprendizaje y pensamiento menos efectivo.
Mientras que los síntomas fisiológicos pueden ser dolor de cabeza, problemas de espalda o cuello, músculos contraídos, malestar estomacal, infecciones, palpitaciones, fatiga , problemas de sueño, aumento de la presión sanguínea y respiración agitada.
Si usted detecta algunos de estos síntomas debe acudir a la unidad médica que le corresponde a fin de recibir el tratamiento adecuado o buscar ayuda de un especialista en la materia.
