La batalla
realidad
contra ficción
Los efectos emocionales –ansiedad, depresión- que producen los contenidos alterados con filtros y efectos digitales en las redes sociales, siempre han estado en debate ya que no coinciden con los objetivos originales de estas interfaces.
BeReal es una aplicación backfront francesa que nació como un movimiento en contra de lo idílico e irreal; por medio de una alerta aleatoria durante el día invita al usuario a hacer una toma en donde quiera que se encuentre, sin importar lo que esté haciendo para mostrar una imagen apegada a la cotidianidad, sin filtros ni manipulaciones.
Pese a que se lanzó en 2019, hasta 2022 tomó impulso y alcanzó notoriedad, particularmente entre los integrantes de la generación Z –nacidos a finales de los 90 y principios de los 2000-; según se dio a conocer en su momento la aplicación llegó a 25 millones de usuarios a nivel mundial.
Recientemente, se dieron a conocer cifras de SimilarWeb en la que se asegura que el número de usuarios bajó a 19.5 millones, cifra que la plataforma ha negado. Sin embargo, en caso ser cierta nos estarían hablando de un desencanto de los usuarios de verse tal como son.
Escenario de tales dimensiones habría sido advertido por la aplicación de Alias Technologies, denominada BeFake AI, la cual en una alusiva provocación plantea “¿por qué ser real cuando es divertido ser falso?”.
La interfaz usa un mecanismo similar a BeReal: por medio de una alerta, invita a los usuarios a tomarse una fotografía donde quiera que esté, sin embargo, cuenta con 20 minutos para rediseñar la imagen por medio de herramientas de inteligencia artificial, solicitando escenarios o escenas a la carta.
“Seamos honestos, no siempre somos lo suficientemente creativos y no todos los momentos son buenos para compartir”, señala BeFake.
A contrapelo, BeReal lanzó el concurso “la persona más real sobre la Tierra” para consolidarse, mantener a su audiencia y crecerla, en él invita a enviar una foto lo más alocada y divertida posible; las fotos que sean finalistas podrían ganar cinco mil dólares o un viaje a cualquier ligar del planeta.
Es la eterna lucha entre lo real y lo fake ¿usted cuál prefiere?
